English | Español | August 15, 2018 | Issue #61 | ||
Milenio obtiene información desclasificadaSegún documentos estadounidenses obtenidos por Milenio Ulises Ruíz “usó mercenarios para sostenerse en el poder”Por Nancy Davies
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D.R. 2009 – Nancy Davies |
A pesar de que el Departamento de Estado desclasificó alguna información, la Agencia Central de Inteligencia (CIA por sus siglas en inglés) clasificó la información restante por los próximos 30 años, por orden ejecutiva. Uno podría pensar que gran parte de la información de la CIA representa un asunto en marcha, debido a que es conocido que el Ejército Estadounidense financia actividades tales como el Proyecto Bowman en la Sierra Norte, ayuda a los programas de privatización de la tierra, monitoreo los puntos clave del narcotráfico en todo México, y patrulla los puntos fronterizos marítimos y terrestres. Históricamente, los temores del gobierno estadounidense no están enfocados en la remota posibilidad de que hordas bárbaras puedan invadir Kansas City, sino en la posibilidad de que otro gobierno socialista en el hemisferio occidental pueda establecer un “mal” ejemplo.
En las primeras horas del 30 de octubre de 2006, un mensaje urgente fué enviado por Garza a distintas oficinas en Washington, incluyendo a la Casa Blanca, el Consejo de Seguridad Nacional, la CIA, el Departamento de Seguridad Interna, y el Pentágono. La razón: “la entrada de la Policla entrada de la Policía Federal Preventiva (PFP) para retomar el control de Oaxaca y aplastar a la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO).”
El mensaje clasificado como “sensible” y de “prioridad” decía: “La crisis en Oaxaca ha alcanzado un nuevo nivel”. Elaborado por el Embajador Tony Garza para que fuera leído solamente por el Presidente Bush y otros ocho funcionarios, decía también: “El gobierno mexicano interviene en Oaxaca. La crisis entró a una nueva fase crítica con el envío de la Policía Federal Preventiva al estado tras la muerte de tres personas el 27 de octubre, incluyendo la del periodista estadunidense Brad Will. El potencial de violencia en los próximos días es alto”.
Garza añade: “El gobierno mexicano tiene que contener ya el conflicto de forma efectiva. Por meses, una de las principales preocupaciones de la crisis política en Oaxaca ha sido la de que se derrame la inestabilidad a otras áreas de la nación”.
El contenido completo del cable permanece clasificado hasta 2016 con el fin de “’no poner en riesgo las actividades internacionales de Estados Unidos’, se estima además: ‘Lo que comenzó como una acción rutinaria de protesta ha escalado hasta un movimiento más amplio que podría estar siendo explotado por grupos radicales’”.
Además, el cable explica que el temor a una revuelta nacional hizo que el gobierno de Vicente Fox nunca considerara remover a Ulises Ruiz del gobierno del estado de Oaxaca: “Muchos en el gobierno federal temen que remover al gobernador sentaría un mal precedente. No quieren dar un enemigo común a los distintos grupos radicales de México”.
En otras palabras, los Estados Unidos vieron a México al final de octubre de 2006, en la antesala de una posible guerra civil. El gobierno de los EEUU dió instrucciones al embajador para que estuviera alerta de una posible propagación de ese peligro.
El embajador estadounidense comenzó a analizar si el conflicto social podría llevar a México a un levantamiento de amplia propagación. “Este cable analizará las implicaciones de la intervención federal, cómo podría impactar el balance del poder en México y cuáles son los posibles escenarios para el futuro de Oaxaca”, él escribió. Me pregunto ¿si estaba pensando en los zapatistas?
Una de las comunicaciones establece literalmente que la llegada de la PFP le salvó el “pellejo” al gobernador, “al limitar la autonomía de la APPO en Oaxaca”.
Sin embargo, el embajador estadounidense calculó que la “operación de pacificación” llevada a cabo por la PFP “podría funcionar” en el estado de Oaxaca “si los mandos de la policía lograban contener a sus subalternos de cometer violaciones a los derechos de la población civil”. “El gobierno mexicano mantendrá la legitimidad de la presencia de sus policías si esa presencia se mantiene relativamente pacífica y el gobierno mexicano sostiene que esta es la única forma de mantener el orden”, Garza consideró.
Los cables dejan clara la opinión negativa que Washington tenía con respecto al papel jugado por el gobernador Ulises Ruiz y por la secretaria general del SNTE, Elba Esther Gordillo.
Con respecto a Ulises Ruiz Ortíz, Garza informó que era “un hombre de mano dura sin apoyo popular” sostenido en el poder “en base a mercenarios”. El gobernador de Oaxaca era considerado en agosto, según uno de los cables, como un “fracaso”.
Uno de los cables dice que “Ruiz falló en incorporar sus programas las molestias de sus opositores y no tuvo la capacidad política de construir coaliciones capaces de gobernar”. En otro de ellos se puede leer que: “El ataque al periódico Noticias fue hecho por sus mercenarios, nos dicen observadores”.
Otros fragmentos de las comunicaciones dicen: “nuestros contactos nos dicen que el gobernador carece de toda legitimidad y está desesperado”. El gobernador “nunca recuperará su autoridad”. Con respecto a la muerte de un integrante de la APPO, asesinado el 10 de agosto de 2006: “se especula que la muerte de José Jiménez fue realizada por pistoleros leales a Ruiz”.
Con respecto a Elba Esther Gordillo, “Washington dejó en claro que su ingreso a las negociaciones hacia el final del conflicto, más que ayudar, terminó por complicar la crisis oaxaqueña.” El embajador Garza dice en un cable del 6 de octubre que “en vez de seguir con negociaciones infructuosas, el gobierno federal prefirió pedir apoyo a Gordillo, pero mientras los federales ofrecían la zanahoria, Gordillo les daba (a la APPO) con el palo”.
Mas aún, a Elba Esther Gordillo se le acusa de “haber saltado a las negociaciones por codicia: ‘La decisión de Gordillo de intervenir en la situación de Oaxaca fue influenciada, muy probablemente, por el hecho de que el gobierno mexicano ofreció al SNTE una gran cantidad de dinero (…) cerca de 3.8 mil millones de dólares a lo largo de seis años’”.
En cuanto a sucesos concretos, en las fotocopias de Milenio se pueden leer descripciones estadounidenses formales como: “...el fin de semana del 25 de noviembre, cuando provocadores convirtieron algo que comenzó como una protesta pacífica encabezada por la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) en una confrontación violenta con la Policía Federal Preventiva.”
Mientras que el gobernador de Oaxaca arroja mierda en todas las direcciones, la lucha continúa. Cinco mil personas, que se reunieron en el zócalo al atardecer, asistieron a una marcha conmemorativa de la invasión de la PFP el 26 de octubre. El acto político incluyó al secretario general de la Sección XXII del SNTE, Azael Santiago Chepi, quién hablo sobre acciones futuras, incluyendo la posible convocatoria a un paro nacional en respuesta al decreto del presidente Calderón de cerrar la compañia de electricidad paraestatal Luz y Fuerza del Centro, donde 44 mil trabajadores quedaron sin empleo de la noche a la mañana.
Los Estados Unidos deben estar todavía escribiendo frenéticos cables.
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