Encontrar a Rusto y Viri

La nota amarillista de Milenio difama a dos universitarios desaparecidos

Por Chen Blanc
Especial para The Narco News Bulletin

24 de agosto 2012

En este país, en medio de una crisis de violencia, los medios comerciales siguen distorsionando la información sobre los acontecimientos que nos afligen cada día, culpando a las victimas de las atrocidades que les afectan.

Viridiana Morales, estudiante de psicología y Roberto Altamirano, egresado de la facultad de artes, ambos de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, desaparecidos desde el 12 de agosto.

Un artículo publicado en Milenio del 23 de agosto del 2012 sobre dos jóvenes desaparecidos es solamente un ejemplo del gran problema que representa la manipulación mediática.

El día 12 de agosto del año en curso Viridiana Morales, estudiante de psicología y Roberto Altamirano, egresado de la facultad de artes, ambos de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos; para festejar su primer año de matrimonio civil, decidieron ir de campamento al pueblo de Tepetlixpa, Estado de México.

Un mensaje enviado desde el celular de Roberto afirma que perderían la señal del celular pero que estaban por llegar a su destino. Esta fue la última información que se obtuvo de su viaje. Con el paso de los días y sin ninguna noticia de ellos, la inquietud de sus familiares y amigos desembocó en la movilización de los mismos.

Las familias de los desaparecidos buscaron en Tepetlixpa cualquier rastro de ellos. Sin resultados expandieron la búsqueda entre los límites de Puebla, Morelos y el Estado de México. El levantamiento de actas atrasó la búsqueda pues las oficinas de la procuraduría, tanto del Estado de México como de Morelos, indicaban a los familiares que la averiguación pertenecía al otro estado, sin querer responsabilizarse de tal trámite, unos explicando que los desaparecidos habían salido de Morelos y otros diciendo que no les correspondía pues se habían perdido en el Estado de México.

Los amigos de los desaparecidos comenzaron a difundir su preocupación por la pareja utilizando las redes sociales para intentar recaudar información. Al parecer ninguno comentó concretamente a donde irían.

Esta misma noticia fue publicada por el periódico Milenio, bajo el título “Se complica búsqueda de jóvenes en Morelos” (publicada el 23 de agosto del 2012, por el corresponsal David Monroy) esta, de alguna manera culpabiliza a los dos jóvenes diciendo que iban en búsqueda de drogas (hongos alucinógenos) con esta frase: ¨ lamentablemente nos enteramos que este chico, no sabemos si ella también… es consumidor de hongos de este tipo¨; habiéndose referido anteriormente a los hongos alucinógenos: ¨…Nos encontramos con que ahí van los jóvenes, pero van a consumir hongos alucinógenos…¨; justificando la insuficiencia de las autoridades en la búsqueda. El mensaje de esta nota está muy clara: De una u otra manera, iban en búsqueda de “droga.” No era gente de “moral,” y por lo tanto, lo que les haya pasado es su culpa.

Desgraciadamente, este caso no es único en México. En el 2010, 16 estudiantes fueron masacrados en la colonia Villas de Salvarcar en Ciudad Juárez. Posteriormente, el presidente Felipe Calderón dijo frente a los medios de comunicación que el asunto se trataba de un grupo de pandilleros, minimizando la tragedia. En realidad, todos eran estudiantes. Ninguno estaba ligado al crimen organizado.

En 2011, Nepomuceno Moreno, integrante del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad y padre de un joven desaparecido, fue asesinado a balazos en la ciudad de Hermosillo. Horas después varios medios locales y nacionales empezaron a acusar el difunto de tener un “historial negro” por haber sido detenido e investigado hace años por un supuesto delito. No mencionaron que salió inocente de todos los cargos en su contra. Y hasta la fecha, las autoridades en nuestro país no investigan el 95% de los asesinatos. “En algo debían de haber estado involucrados.” Se dice.

Actualmente, la nota publicada en Milenio se está difundiendo en Internet, manchando el buen nombre de nuestros compañeros, igual que los jóvenes de Villas de Salvarcar, Nepomuceno Moreno y decenas de miles más.

Hace más de un año un movimiento de víctimas surgió en este país para declarar un “Estamos hasta la madre” y poner un “hasta acá,” el caso de la desaparición de nuestros compañeros nos recuerda que nos toca todavía un largo camino. Hace meses, el movimiento estudiantil “Yo Soy 132” reconoció que el principal fabricante de mentiras y manipulaciones en México son los medios masivos de comunicación. La nota amarillista que difama a nuestros amigos en Milenio demuestra que los estudiantes teníamos razón. La tarea de ambos movimientos sigue pendiente y nos toca a nosotros seguir adelante.

Al criminalizar a las víctimas de la inseguridad, los medios comerciales, justifican y apoyan a criminales, soldados y policías, sobre su ineficiencia. De esta manera no permiten que la exigencia de la justicia converja entre movimientos sociales y ciudadanos inactivos, hacen retrocesos gigantes con pensamientos moralistas, que desenfocan la mirada del verdadero problema. Por lo pronto, nuestra tarea pendiente no tiene que ver con la política. Es encontrar a Viri y Rusto.

Algunos estudiantes de las facultades de artes y psicología de la U.A.E.M. actualmente se están organizado, pidiendo apoyo a sus compañeros. Esto podrá subsidiar los gastos de los vehículos ofrecidos voluntariamente por otros egresados de la facultad de artes. Estamos colaborando con ambas familias para, en brigadas, acompañar a las autoridades tratando de ejercer presión en las mismas. Y es este espíritu de solidaridad que ojala, nos ayude a encontrarlos y, en algún momento, nos sacará del hoyo en que México se encuentra hundido.

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