English | Español | August 15, 2018 | Issue #60 | |||
Radio Globo y el Canal 36 anuncian el regreso del Presidente ZelayaEl presidente golpista Micheletti finalmente acepta que tienen razónPor Belén Fernández
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El periodista de Radio Globo, Eduardo Maldonado. |
Por casualidad, ya había planeado una visita a Radio Globo ayer. Ésto con la intención de documentar el papel de los noticieros y estaciones de radio habladas de Tegucigalpa en la resistencia al golpe de Estado. Con 14 filiales en todo el país, el poder de movilización de la estación fue rápidamente reconocido por el régimen golpista, que intentó cerrarla tres veces este verano. Cruzando la puerta del hotel, camino a la estación de radio, el propietario del mismo me informó que mi amigo había regresado a Honduras; confundida le pregunté a que amigo se refería, y rápidamente cambio al Canal 36, la única estación de televisión antigolpista, que en ese momento mostraba una fotografía con el rostro de Zelaya.
En un taxi colectivo hacia la avenida Francisco Morazán, donde se ubica Radio Globo, una pasajera de edad avanzada se burló de que el regreso de Zelaya era solo un rumor inventado por los medios antigolpistas para incitar a las masas. El taxista coincidió con ella y se refirió a Zelaya como “El Bigote,” no obstante, aprovechó el intercambiar consignas en favor de Zelaya y señales de apoyo con vehículos que apoyan la resistencia para obtener favores con relación al tráfico. Posteriormente se mostró hábil para incitar a las masas cuándo vió a un peatón muy parecido al presidente golpista y le gritó, “¡Ey, Micheletti!”
La pasajera anciana cambió ligeramente su análisis de la situación cuando vió que la oficina de las Naciones Unidas en Tegucigalpa, donde en un principio se informó que Zelaya se encontraba, estaba bloqueada por vehículos militares. La mujer admitió que semejante demostración no pudo haber sido incitada por los medios de comunicación antigolpistas, ya que, éstos no tenían el control sobre los militares; posteriormente, la mujer expresó descontento frente a la pregunta retórica del taxista sobre quién tenía el control sobre los militares en este punto; el hecho de que los medios antigolpistas hayan informado la verdad no altera, mientras tanto, la convicción de exasperante naturaleza de la mujer.
21 de septiembre de 2009: Los hondureños celebran en las calles el regreso de su elegido presidente. D.R. 2009 Krastune, Chiapas Indymedia |
El llamado de Radio Globo para tener un poco de orden en medio del caos desacata las acusaciones de terrorismo mediático que el régimen golpista ha utilizado para atacar a sus periodistas. Tales acusaciones no toman en cuenta las distintas definiciones de terrorismo mediático que pueden ser interpretadas, tales como la violencia perpretada por soldados hondureños en contra del personal de Radio Globo el día del golpe de Estado, o cuando los militares vertieron ácido sobre los transmisores de Radio Globo y del Canal 36. Ayer, para protegerse contra nuevos ataques, Radio Globo mantenía en estrecha vigilancia sus instalaciones, especialmente la puerta de la cabina, además de pedir que un contingente de miembros de la resistencia se reuniera fuera del edificio como elemento de disuasión. La vigilancia de las instalaciones del Canal 36 consistió en una amable negativa de permitirme la entrada la tarde de ayer, debido a la reiterada recepción de amenazas de muerte.
En las afueras del edificio hablé con un camarógrafo del Canal 36 que se encontraba filmando a un helicóptero militar mientras volaba en círculos sobre las colinas de Tegucigalpa, y quién me afirmó que lo que dice Micheletti frente a la situación actual son “puras mentiras”. Ese día, Rony Martínez ya había aludido en Radio Globo la naturaleza falsa del presidente golpista, donde observó la sonrisa falsa de Micheletti luego del regreso de Zelaya, y dijo que ésa era la primera vez que veía al presidente golpista tan incómodo. El malestar de Micheletti pudo haber sido uno de los factores que contribuyeron a la declaración del toque de queda que se extiende desde las 4 p.m. de ayer a las 6 p.m. de hoy—un total de 26 horas hasta el momento—y, a pesar de que intentó ocultar el malestar, ayer por la noche admitió en un discurso que Zelaya había regresado a Honduras pero negó que su presencia en el país indicara algún tipo de cambio en la realidad hondureña.
El discurso de Micheletti careció de cualquier preámbulo tipo “Flash Informativo”, pero si incluyó una repetición áspera del “Viva Honduras,” y de un alegato de no saber porque Zelaya estaba en el país. Determinando por fin que Zelaya estaba en el país, el siguiente paso de Micheletti puede ser el averiguar el por qué está aquí, para que así los ciudadanos a los que se les prohíbe salir de sus hogares no tengan que depender de los medios de comunicación a los que trata callar.