English | Español | August 15, 2018 | Issue #48 | ||||
A 10 años de la matanza de Acteal, “seguimos hambrientos de justicia, sedientos de paz”: organización civil Las AbejasLos autores intelectuales de la masacre de una comunidad pro-zapatista de Chiapas continúan libresPor Raúl Romero
|
Ceremonia en Acteal, el 22 de diciembre de 2007. Fotos D.R. 2007 Raúl Romero |
El saldo fue de 15 niños y niñas –entre ellos Guadalupe Gómez de 11 meses de edad-, 21 mujeres y 9 hombres asesinados, sumando un total de 45 personas. La barbarie fue de tal magnitud que la averiguación previa número AL7CISJI/657/947, de la causa penal 361/99, revela que en las necropsias practicadas a las 4 mujeres que se encontraban embarazadas se encontró que todas sin excepción tuvieron exposición de viseras, causada por la apertura del vientre con machetes. Los sobrevivientes cuentan que los paramilitares extrajeron los fetos y jugaron con ellos. El mensaje era claro, comentan los habitantes de la comunidad, “acabar con la semilla de la rebeldía y amenazar a todas las comunidades que tenían una organización fuerte y una relación con los zapatistas”.
La masacre comenzó a las 11 de la mañana y terminó pasadas las 5 de la tarde. Es decir, duró más de 7 horas sin que la policía o el ejército intervinieran, a pesar de que Acteal se encuentra a hora y media de San Cristóbal de Las Casas. Este dato ha permitido afirmar a las organizaciones de derechos humanos que se han ocupado del caso y a los familiares de las victimas que el gobierno estuvo involucrado en el crimen, “sea por acción, por omisión o por inacción”. Un dato más que refuerza esta hipótesis es que entre los 9 detenidos confesos se encuentra un exmilitar.
Hoy se cumplen 10 años de aquellos sucesos. Sobre el lugar donde los paramilitares amontonaron los cuerpos de sus victimas se erige la Columna de la infamia, escultura hecha por el artista danés Jens Galschiot y que sirve, comentan los habitantes, “para no olvidar, para recordarnos a nuestros muertos, para seguir pidiendo justicia”.
Y es que de las 124 personas involucradas en la masacre -todas denunciadas por los sobrevivientes y los habitantes de Acteal,- aún están libres más de 40 y de las detenidas, apenas el 23 de julio del año en curso se dicto auto de formal prisión a 24. En cuanto al resto, aún es incierto su futuro. Sin embargo, lo más lamentable –expresan miembros de Las Abejas- es que los autores intelectuales del crimen todavía permanecen libres y gozan de la protección del Estado. Ante esta denuncia, un grupo de ciudadanos norteamericanos propuso enviar cartas a la Universidad de Yale exigiendo el despido de Ernesto Zedillo, quien fuera presidente de México cuando sucedió la matanza y quien actualmente es profesor de esa institución.
Entre los invitados especiales, que más que invitados son “miembros de la comunidad”, están el Obispo Emérito Samuel Ruiz y el Obispo de Saltillo Raúl Vera; ambos “comprometidos con la causa de los pobres” e identificados como afines a la teología de la liberación, movimiento de gran importancia durante las ultimas tres décadas del siglo XX y que tuvo fuertes nexos con los movimientos de liberación nacional – donde también tuvo militantes – que aparecieron por toda América. De hecho, el Obispo Raúl Vera ha sido amenazado recientemente por las autoridades del Vaticano de ser removido de su obispado en Saltillo, por su cercanía con las viudas de los obreros fallecidos en Pasta de Conchos. Raúl Vera y Samuel Ruiz leyeron el resumen del informe titulado “Acteal, recordar para no olvidar” realizado por el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (Frayba), que Las Abejas han elegido como representante legal del caso.
Al mismo tiempo la prensa nacional informa que las oficinas del Centro de Derechos Humanos de la Diócesis de Saltillo, organización que preside Raúl Vera, han sido asaltadas por dos encapuchados, y que Mariana Villareal Contreras, quien se encontraba allí, ha sido secuestrada y golpeada. Asimismo, reportan que los asaltantes se han llevado documentos importantes relacionados con los casos que el Centro investiga. La respuesta no se hace esperar y los miembros del Frayba comienzan a redactar un documento donde condenan estos hechos y exigen a las autoridades correspondientes el pronto esclarecimiento del caso.
Felipe Arizmendi, Samuel Ruiz, Enrique Díaz y Raúl Vera Lòpez (de izquierda a derecha). |
Otra de las resoluciones del encuentro es buscar por todos los causes legales existentes la aplicación de justicia y aunque se dijo “tener poca confianza” en el sistema judicial mexicano, los integrantes del foro manifestaron que no cesaran en buscar otras vías. Además, señalaron que se mantendrán atentos a la resolución que dicte la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, instancia que ya está encargada del caso.
Los asistentes al encuentro también resolvieron exigir a las instancias correspondientes en México que la Declaración Universal de los Derechos Indígenas sea convertida en ley, al igual quu la desmilitarización, el desarme de los grupos paramilitares y el cese delas hostilidades contra el Obispo Raúl Vera.
Haz click aquí para más del Otro Periodismo con la Otra Campaña