“La represión no detendrá La Otra Campaña”

Adherentes, denuncian escalada de actos de intimidación y persecución política a nivel nacional

Por Bertha Rodríguez Santos
El Otro Periodismo con la Otra Campaña en Chiapas

25 de febrero 2006

San Cristóbal de las Casas, Chis.- La detención de Dámaso Villanueva, uno de los promotores de La Otra Campaña en esta entidad, fue considerada por representantes de organizaciones sociales y de derechos humanos como parte de una estrategia de intimidación y represión política desatada en todo el país en contra de quienes apoyan la iniciativa zapatista.

El módulo de información donde trabaja Dámasco Villanueva

El encarcelamiento de Dámaso Villanueva y la orden de aprehensión girada recientemente en contra de Mario Alvarez, de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), -ambos del estado de Chiapas- no son hechos aislados sino que son parte de una campaña de intimidación y persecución que busca inhibir la participación ciudadana en la Otra Campaña, denunciaron integrantes de media docena de organizaciones sociales y de derechos humanos.

Durante una rueda de prensa realizada en las instalaciones del Centro de Integración y Desarrollo Indigena (Cidesi), un joven que se identificó como Claudio y quien acompañaba a Villanueva cuando fue detenido, informó que alrededor de las 10:30 de la mañana del viernes 24 de febrero, tres hombres vestidos con el uniforme de policias municipales le dijeron que tenían una orden de aprehensión en su contra.

Sin permitir que éste leyera dicho documento, los policías lo esposaron y a pesar de que no opuso resistencia, fue empujado al interior de un vehículo.

Desde 1995, en la plaza de la catedral de San Cristóbal se instaló un módulo de información sobre el movimiento zapatista. Desde hace varios años, Dámaso Villanueva ha participado activamente en dicho trabajo de difusión.

Después de su arresto esta mañana, varios de sus compañeros de La Otra Campaña se dirigieron al Palacio de Justicia para indagar por su paradero. En la oficina del II Juzgado del Ramo Penal y Delitos no Graves, los funcionarios les negaron el acceso al expediente, alegando que éste se encontraba en el Centro de Readaptación Social (Cereso).

Luego de una frustrante lucha en busca de información y ante la negativa de las autoridades de todos los niveles de proporcionar datos sobre el caso, se descubrió que existe una Averiguación Previa iniciada el 16 de octubre de 2004 (Av. Prev. AL40/54-1241/2004); una orden de aprehensión girada el 19 de octubre de 2005 (orden 165/2005) y ejecutada el 24 de febrero de 2006.

La demanda fue presentada por la empresa de telecomunicaciones Pegaso por presuntos daños en propiedad ajena en la que acusa a Villanueva de derribar una antena de telefonía celular. El monto por este supuesto delito es de alrededor de 2 millones 300 mil pesos.

Integrantes de organizaciones como el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas, el Comité Para la Defensa Popular, y el Centro de Derechos de la Mujer, entre otras, señalaron que el estado mexicano está utilizando el aparato de justicia para perseguir a los luchadores sociales como parte de la represión e intimidación en contra de quienes participan en La Otra Campaña.

Señalaron que de la misma forma en que el estado se ha deslindado de las actividades de los grupos paramilitares como parte de la Guerra de Baja Intensidad, ahora utiliza a empresas y al poder judicial para criminalizar y encarcelar a integrantes de colectivos, familiares y miembros que impulsan La Otra Campaña.

Además de la detención de Dámaso Villanueva, los denunciantes consideran que otros hechos como el intento de asesinato del luchador social Gustavo Jiménez Pérez, al igual que la cancelación de las cuentas bancarias de la organización No Gubernamental Enlace Civil por parte de Bancomer y HSBC son parte de la campaña de persecusión y represión política en contra del movimiento zapatista.

Al referirse a la detención de Dámaso Villanueva, Erasto Molina Urbina, promotor de La Otra Campaña dijo que los participantes se sienten “indignados y ofendidos pero no nos intimidamos”. Lejos de frenar al movimiento que respalda al Ejército Zapatista de Liberación Nacional, las organizaciones sociales se sumarán “al movimiento nacional por la liberación de los presos políticos y el cese de la represión en todo el pais” .

La indignación y las protestas por la detención de Dámaso Villanueva provocó que cientos de personas realizaran una movilización en la plaza de San Cristóbal. Por la noche la protesta se trasladó al Palacio Municipal donde se pretende establecer un plantón permanente hasta lograr la liberación de Villanueva, quien aparte de ser promotor de La Otra Campaña, es representante de su comunidad ante la Organización de Barrios de las Colonias del Sur; durante la visita del Delegado Zero, se desempeñó como encargado de uno de los cinturones de seguridad.

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