English | Español | August 15, 2018 | Issue #32 | ||
“Pacho” Cortés desde la cárcel:“Tengo temor que cualquier día me maten”Por Alex Contreras Baspineiro
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Pacho Cortés, hablando con Narco News en la cárcel de máxima seguridad Chonchocoro Foto: Agencia Narco News D.R. 2004 |
El martes 2 de marzo, entrevistamos a Cortés que se encuentra detenido en la cárcel de máxima seguridad ubicada en El Alto de La Paz a más de 4.150 metros sobre el nivel del mar.
El 10 de abril de 2003, hace cerca de un año, junto a él fueron detenidos el ex concejal de La Asunta (Los Yungas de La Paz,) Claudio Ramírez y el dirigente del Chapare (Cochabamba), Carmelo Peñaranda. Los tres, junto a otras dos menores de edad que gozan de libertad provisional, fueron acusados por el gobierno boliviano (aunque no de manera formal) de ser “terroristas”.
El gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, presentó a los presuntos “terroristas” ante los medios de comunicación comerciales primero como miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), no encontró pruebas; luego se les acusó que eran militantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) tampoco probaron nada y al final señalaron que pretendían formar grupos irregulares ligados al narcotráfico.
En 11 meses de reclusión, no les probaron nada y no existe acusación formal y, por tanto, menos sentencia, pero los supuestos “terroristas” se encuentran guardando reclusión en una cárcel de máxima seguridad.
“¿Por qué no me pueden matar si es que la Embajada Norteamericana no encuentran pruebas para justificar al mundo que soy un terrorista?, pues pueden inventar pruebas para matarme o hacer desaparecer”, remarca el colombiano.
Según Cortés, a parte de que algunas autoridades lo acusaron de terrorista, también intentaron involucrarlo como planificador de fugas, narcotraficante y amotinador, entre otras cosas.
En la actualidad, aunque se encuentra delicado de salud es vocero de los extranjeros presos y coordinador jurídico de todos los detenidos. Padece de una úlcera y gastritis aguda, sangrado nasal frecuente, problemas en el sistema auditivo, dolores en los riñones y el aparato circulatario y estrés; además el dolor de cabeza es continuo, producto de la altura.
La Dirección del Régimen Penitenciario le considera a Pacho como una persona de “alta peligrosidad” y, por eso, junto a otras cuatro personas se encuentra aislado del resto de sus compañeros.
Según el colombiano, en el marco de la política neoliberal y la globalización del mundo, los más pobres son las víctimas de la represión y la persecución. “Nos quieren hacer aparecer como los causantes del mal en el mundo y eso es totalmente injusto”, remarca.
“Gente como Jesucristo que luchó por los pobres, gente como Jesucristo que no estuvo de acuerdo con los impuestos para la gente pobre, gente como Jesucristo que predicó la justicia y la igualdad fue detenido, torturado y asesinado ¿por qué nosotros también como seres humanos que luchamos y predicamos a favor de los más pobres no debemos pasar por esta situación?”, nos dice en tono pensativo.
Cortés al estar privado de libertad y sin un proceso judicial previo, se siente mal anímicamente pero no se siente castigado. “Para mí Chonchocoro no es un castigo, es un sacrificio. Algunos dirigentes que somos leales y consecuentes con nuestras bases tenemos que sufrir pero tenemos la mejor recompensa que es el apoyo y la solidaridad”.
Desde la cárcel, Pacho convocó a los campesinos, obreros, desocupados, indígenas, mujeres, policías, periodistas y a los profesionales a buscar la unidad y a no ser conformistas. La unidad se la debe construir en cada país y en el mundo.
Aunque aún escucha, lee y observa informativos de algunos medios de comunicación comerciales, Pacho confiesa que siente molestia con la mayoría de los medios por la forma cómo trataron su caso.
Testimonios de algunos periodistas, como el principal dirigente de los trabajadores de la prensa de este país, Fredy Morales, aseguran que antes del arresto de los considerados “terroristas” algunos medios de comunicación ya habían recibido la información desde la propia Embajada de Estados Unidos en Bolivia.
Según Pacho, algunos medios del sistema, ayudaron al gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada a acusarlo de “terrorista” y luego se olvidaron de su situación, no existe ningún seguimiento.
El colombiano al principio de su detención, dijo que recibió un gran apoyo a nivel nacional e internacional, pero con el pasar del tiempo y considerando que le tildan de “terrorista” ahora pasa como desapercibido.
En su tierra natal, Colombia, expresa que existe mayor expectativa y calor social sobre su caso a través de las organizaciones campesinas y otras de carácter social, pero también del propio gobierno. “Estoy esperanzado de alguna manera para que los movimientos sociales levanten su espíritu de hermandad y solidaridad y que continúen esta lucha; además debo decir que mientras el gobierno colombiano me apoya, la embajada norteamericana me acusa”, afirma.
El sábado 6 en Villa Tunari y el domingo 7 en Ivirgarzama, poblaciones ubicadas en el Trópico de Cochabamba se realizarán masivas concentraciones de productores de coca demandando la libertad de sus dirigentes detenidos por presuntos vínculos con Pacho, pero también reclamando que cesen las falsas acusaciones contra algunas personas a quienes se las califica de “terroristas”. Entre las demandas se incluye la libertad de Francisco Cortés.
“Esta detención no es sólo contra Francisco Cortés, sino es el principio de las detenciones a muchos dirigentes sociales que luchamos por una mejor sociedad. Eso pretende el neoliberalismo y la política de globalización”, enfatiza.
Al ser consultado qué espera de su proceso, Cortés responde: “Espero cosas buenas y cosas malas. Si viviéramos en un mundo de justicia esperaría cosas buenas, pero en un país como Bolivia donde no existe justicia para las mayorías sino sólo para unos pocos, puedo estar sometido a cualquier cosa, incluso llegué a pensar que es posible que me maten”.
Pacho confiesa que lo que más ansía y sueña es recuperar su libertad para retornar a su país o buscar otro, pero seguir haciendo las actividades que realizaba antes de su detención: defender los derechos humanos y la vida…