Trabajamos sin ataduras

A veces nuestra atadura es la parte económica, pero ni esa nos detiene

Por Quetzal Belmont
Escuela de Periodismo Auténtico, graduada y profesora

23 de noviembre 2009

No imagine que en julio del 2004 mi vida diera un giro, estando en México, agarre una mochila, eche lo indispensable de ropa y en una maleta aparte lleve cuidadosamente cámara de foto, video y una grabadora de audio.

Quetzal Belmont
Mi destino fue Bolivia, no conocía a alguien, pero llegue a casa del ahora vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, con quien alguna vez intercambie e-mail en una charla que él dio en México, en la que hablaba sobre La Guerra del Gas en su país, desde aquella platica supe que tenía que ir a Bolivia, y lo hice.

Álvaro me contacto con periodistas de La Paz, las primeras semanas dormía en un hotel de paso en el que a cada rato sonaba la alarma de entrada y salida de los clientes, a la par acudía diario a reuniones previas para cubrir el Referéndum sobre la Nacionalización del Gas.

Pedí cubrir Senkata, por aquél entonces una zona conflictiva de la zona de El Alto, de ahí hice durante el día varios enlaces de radio, en medio de indígenas, militares, policías quema de llantas y estallidos de dinamita (ya que varios habitantes de esa región son ex-mineros). Al grito de: ¡Nacionalización… Carajo! hice mi cobertura. Aquella ocasión uno de mis compañeros de trabajo fue Brad Will (video reportero independiente asesinado durante el conflicto social de la APPO en Oaxaca, México en el 2006).

Justo después de esa cobertura en Senkata, Bolivia aparecen en mi vida Al Giordano, Narco News y el Periodismo Auténtico, un trío que en realidad son uno mismo. Por recomendaciones de compañeros periodistas, sugieren a Giordano, que sea alumna de su escuela, después de varias platicas él acepto.

Fue a partir de ese momento que encontré otra manera de hacer periodismo, otra manera de contar las cosas, de poder ver un espejo, pero también ver que hay detrás de ese espejo y no solo quedarme con la mirada del frente, un en el que la palabra no es un adjetivo sino una forma de hacer las cosas, una forma de vida combinado con honestidad y compromiso.

Un compromiso que no solo es personal, sino se suma a lo social, a lo humano, a nuestra verdad, una verdad que tratamos muestre lo más fidedigno; es complicado hablar de objetividad, si por ejemplo, cuando miras una pintura desde diferentes puntos de ubicación la visión cambia, sin embargo, buscamos que nuestra visión sea transparente, sin maniqueos, de ahí la importancia de no formar parte de los grandes monopolios de información, que seguramente muy a pesar de sus reporteros estos medios tergiversan o mutilan la realidad, la “noticia”.

Estando en la Escuela de Periodismo Auténtico, uno obtiene las herramientas, conocimiento y contactos para después desarrollarse en el terreno, en la acción, tiene los suficientes elementos para poder construir y contar sus historias, historias que tendrán eco en distintos rincones del mundo ya sea a través de radio, video o prensa escrita.

Historias que pueden contar, denunciar o mostrar parte de una realidad, historias que contamos de otra manera. Por eso extiendo la solicitud para invitarlos a que apoyen económicamente a este gran nido que es la JSchool, un nido que esta criando muchas aves para que emprendan su vuelo. Aves de distintos colores, formas y especies que vienen de distintas regiones del mundo.

Puedo asegurar que después de vivir esta experiencia la vida de cada uno de los que asisten, cambia, es parte de un crecimiento personal, laboral, de formación.

Debido al espacio y apoyo que he tenido en Narco News, después de haber cursado la escuela en el 2004; he podido colaborar en coberturas como La Otra Campaña zapatista, e informar sobre lo ocurrido en Atenco en Mayo del 2006, (Redada en la que la policía federal, irrumpió en el poblado de San Salvador Atenco en México donde violento, golpeo y abuso sexualmente de la gente).

Realmente después de la escuela hay un trabajo de continuidad, de ejercer, de salir al “campo de batalla” con pluma, libreta, cámara o grabadora, estando listos para “disparar”, disparar: palabras, imágenes, letras, sonidos, con una sola finalidad: contar, retratar nuestra visión y compartirla.

Por último puedo decir que me veo y veo a mis compañeros como personas que tenemos el corazón en la mano, en la política y en lo social, somos gente que tratamos de no permearnos completamente con lo cotidiano, con los estándares de las grandes empresas comunicadoras, trabajamos sin ataduras, a veces nuestra atadura es la parte económica, pero ni esa nos detiene, seguimos, seguimos…

Usted puede donar en línea a través del siguiente enlace:

http://www.authenticjournalism.org

O puede enviar un cheque a: