La Sección XXII protesta un nuevo asesinato con un paro de 72 horas en Oaxaca

El Pueblo de San Pedro Jicayán expulsó a los partidos políticos: “Estamos preparados para tomar el poder...”

Por Nancy Davies
Comentario desde Oaxaca

4 de septiembre 2009

La Sección XXII del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) interrumpió sus actividades cotidianas en Oaxaca para protestar por el nuevo asesinato de un maestro. Más de veinte maestros fueron asesinados por la represión en 2006. De esto nunca se le han rendido cuentas a nadie.

Después de que la XII paralizara por 72 horas oficinas gubernamentales, carreteras y escuelas de todo el estado, el gobierno de Ulises Ruíz Ortíz (URO) capituló ante las demandas de los profesores—al menos sobre el papel. El equipo de negociación de URO “prometió” acciones en varios frentes:

1. La Sección 22 recuperará cerca de 58 escuelas aún en poder de la Sección 59 (sindicato príista), mientras la gente de la 59 valora otras opciones. Este acuerdo incluye la suspensión tanto de los módulos irregulares de educación como de los salarios de los maestros de la 59.

2. Se expedirán al menos 27 órdenes de aprehensión contra los que dispararon armas de fuego. Además del maestro asesinado Norberto Camacho Sarabia, una maestra y otras veinte personas resultaron heridas. La Secretaría de Seguridad Pública indicó que elementos de la Agencia Estatal de Investigación estarán a cargo de la investigación.

3. Una petición de “desaparición de poderes” en Santiago Laollaga (que experimentó una situación similar pero sin heridos graves) y en San Pedro Jicayán, lugar de los hechos, será enviada al congreso local. Supuestamente, dos funcionarios municipales príistas seguirán el “acuerdo”. Ésto es la entrega de las escuelas sin más muertos.

Los acuerdos fueron firmados por una comisión tri-partita compuesta por el Secretario General de Gobierno (Segego), Jorge Toledo Luis; el Procurador General de Justicia del Estado, Evencio Nicolás Martínez Ramírez; el Director General del Instituto Estatal de la Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), Abel Trejo González; y por el Secretario de Seguridad Pública Estatal, Javier Rueda Velásquez.

El Secretario General de la Sección 22, Azael Santiago Chepi, habló luego de la negociación a una multitud de miles de maestros que esperaban en el zócalo de Oaxaca. Señalo que los acuerdos son una buena señal si se quiere evitar una repetición de lo sucedido en 2006. En mi opinión no es una amenaza vacía. Dijo a los maestros reunidos “Exigimos también el cese de la represión, el cese de las hostilidades, porque la tolerancia tiene sus límites y no vamos a permitir un muerto más. Además, vamos a recuperar las escuelas, por cualquier medio, como nuestros compañeros lo hicieron en el Valle Central y en la Mixteca, en este sentido, nos mantendremos movilizados…estamos dispuestos a realmente asumir el poder popular que hemos anhelado tanto… la Sección 22 estará en solidaridad con los demás… tenemos que encontar un acuerdo sobre un solo punto: la lucha contra el Estado.”

Azael Santiago Chepi en el zócalo. D.R. 2009 Francisco Ramírez

A raíz de los disparos del 28 de agosto, cuando un grupo de maestros de la Sección 22 trató de recuperar la escuela primaria Libertad, la asamblea comunal de San Pedro Jicayán se reunió y votó en favor de la reinstalación de la antigua forma de gobierno de usos y costumbres, sin partidos políticos. Las ahora ex autoridades príistas: el edil y sus funcionarios fueron expulsados de la administración y en su lugar, elegidos por asamblea, se instaló un nuevo presidente municipal con nuevos funcionarios. El siguiente paso será conseguir la que la legislatura estatal apruebe el cambio de gobierno, lo que el poder ejecutivo ahora ofrece como parte de la solución magisterial.

Sin embargo, el edil Leonardo Eliezer Silva Palacios niega que haya tenido que ver con el ataque que mató a Artemio Norberto Camacho Sarabia y que hirió a Leonides Celia Mejía. Ésta última fué transportada al hospital general en Pinotepa Nacional. Según se informa, Leonides está embarazada, pero se encuentra en recuperación y el bebe no resultó herido. Entre las personas heridas de gravedad se encuentran un padre y agente policial de Santiago, municipio de San Pedro Jicayán. Su condición es reportada como grave. El municipio de San Pedro Jicayán está localizado en la región oaxaqueña de La Costa, a 416 kilometros de la ciudad de Oaxaca, y en la frontera con Guerrero. La escuela estaba en poder del PRI y de la Sección 59.

Previamente, unos tres mil maestros de la ciudad de Pinotepa Nacional, habían hecho un llamamiento a las autoridades para intervenir en el caso, sin embargo, las autroridades, encabezadas por Leonardo Silva Palacios, se colocaron del lado del PRI manteniendo a la Seccion 59 con el control. Cuando el intento físico de recuperar la escuela se puso en marcha, por lo menos veinte personas resultaron heridas, entre ellos padres de familia que participaron en la toma. Los líderes de los tiradores fueron identificados como Julio Antonio Mejía, ex presidente municipal y teniente retirado del Ejército Mexicano; y el ex diputado Sebastián Merino. Su arsenal incluía desde pistolas, escopetas, hasta rifles AK-47. Los profesores, como de costumbre, solamente portaban piedras y palos.

En cuanto a Silva Palacios, que alega ser completamente inocente, se mantuvo guarecido en el palacio municipal. Dice que el IEEPO le dijo que se mantuviera alejado de la disputa. Silva Palacios declaró que los agresosres armados no son militantes del PRI sino ciudadanos ordinarios. En cuanto a las Sección 59, su dirigente, Erika Rapp Soto, niega cualquier participación de su escindido sindicato príista en el tiroteo.

El nuevo consejo de San Pedro Jicayán consiste solo en residentes indígenas locales. Los cuales fueron citados en Noticias: “Estamos de acuerdo en asumir esta tarea porque fue decisión de los ancianos, de los profesionales y de los demás habitantes de los pueblos. Fuimos nombrados por usos y costumbres como en tiempos anteriores cuando elegiamos a nuestras autoridades municipales que realmente gobernaban para el bienestar y la paz social de Jicayán.”

Además, señalo el anciano Juan López Santiago, “Nosotros no vamos a permitir que se nos envíe gente desconocida; queremos un nuevo presidente municipal, pero queremos que sea un persona nativa de nuestro pueblo, que es igual a nosotros, que nos conoce y que nos respeta.”

En todo el estado, muchas organizaciones se pusieron de pie en señal de respaldo. La mayoría de ellas son grupos campesinos e indígenas pequeños, no los intelectuales de la ciudad, quizá por esa razón más significativos. Omar Esparza Zárate, presidente de la red de radios comunitarias indígenas del sureste y miembro del Movimiento Agrario Indígena Zapatista (MAIZ), dijo: “Este asesinato que se cometió contra los maestros de la Sección XXII del SNTE es una muestra de que el gobierno de Ulises Ruiz busca controlar todos los sectores de la sociedad con miras al próximo proceso electoral del 2010, ya que temen que el gobierno Priista perderá la gubernatura, por lo que busca amedrentar a las organizaciones con sus grupos paramilitares.”

Esparza Zarate dijo que hicieron un llamado a todas las organizaciones a conformarse en un frente común nacional para luchar y llevar la resistencia hasta a “todos los rincones de Oaxaca” para que el gobierno responda a las demandas de la comunidades indígenas.

Junto con Esparza Zárate, el asesor del Frente Nacional Indígena y Campesino (FNIC) Jaime Martínez Gordillo, condenó las agresiones que sufrieron los maestros sección XXII del SNTE por parte de los paramilitares priístas de la sección 59. Exigió al gobierno el esclarecimiento de los hechos y que se detenga a los responsables de los homicidios. Ofreció el apoyo del FNIC a la Sección XXII, y en caso de que estos últimos busquen asistencia, “...las organizaciones y la ciudadanía buscaríamos vías alternas para exigir el cumplimiento de la ley”. El FNIC cuenta con cerca de 1000 activistas.

Por su parte, Rubén Eleuterio Santillán, Coordinador del Frene Indígena de Organizaciones Binacionales (FIOB) hizo un llamado al gobierno del estado. El Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas (CEDHAPI) que encabeza Maurilio Santiago Reyes señaló: “… creemos que estos hechos no son aislados, son situaciones que se han dado en otros momentos y la CEDHAPI siempre se ha pronunciado ante tales atrocidades, ya que existen grupos de poder político priístas, cacicazgos, que son protegidos directamente por la cúpula del gobierno del estado”. El coordinador de otro grupo, Comité de Defensa de los Derechos del Pueblo (CODEP) habló acerca de sucesos similares en las regiones de Tehuantepec y de la Mixteca. Cástulo López dijo que: “… los hechos ocurridos en San Pedro Jicayán, fueron perpetrados por grupos de criminales auspiciados y al servicio del gobierno del estado, estas acciones cobraron la vida de unos profesores y varios heridos, y condenamos dicha situación en donde Ulises Ruiz Ortiz es el responsable directo por haber creado al Frankestein que es la sección 59 que actúa bajo un estilo de grupo paramilitar, para erosionar a la sección 22…”

Como Cástulo López indica, la lucha política en Oaxaca cada día se torna más peligrosa. “Oaxaca tiene una enorme lista de crímenes por motivos políticos, y más en la administración de Ulises Ruiz… vivimos un cacicazgo político en donde cada vez estamos convencidos que el fin del autoritarismo se debe de extinguir con el cambio del modelo económico y de régimen…”

Todas las distintas presiones inducen a URO a capitular, al menos en apariencia. ¿Que tanto toma con seriedad el clamor popular de lo que me parece ser la alarmante proximidad de la revolución?

Traducción: Fernando León

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