The Narco News Bulletin |
August 16, 2018 | Issue #44 |
narconews.com - Reporting on the Drug War and Democracy from Latin America |
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Diciembre 31, 2006: Oventic, Chiapas: "Como una mujer y como una persona indígena tengo mucho que aprender y mucho por enseñar". Estas fueron las palabras de la Comandanta Zapatista Sandra, cuando abrió la sesión dedicada a las pláticas acerca de las luchas de las mujeres dentro de la lucha de toda la gente. Para las comunidades Zapatistas, y otras comunidades indígenas ya involucradas en luchas externas, sus luchas internas a veces pueden ser minusvaluadas. En esta ocasión, los pueblos del mundo fueron invitados a escuchar las historias de estas mujeres, sus resistencias y sus triunfos.
Foto: D.R. 2007 Jesús Domínguez |
El trabajo de las mujeres y las presencias de las mujeres con frecuencia se ignoran y se devalúan. El objetivo de esta reunión era, en parte, dar a conocer que mucha de la producción y reproducción del hogar, la familia, y por lo tanto de la comunidad, es labor de las mujeres. 'Trabajamos en el rancho, trabajamos el café, la milpa, los colectivos, las tortillas y las panaderías", dice una.
Una carta de las mujeres del Caracol (término Zapatista para las cabeceras de los muinicipios autónomos) de Roberto Barrios narra con detalles el trabajo diario en las comunidades: "Nos levantamos a las tres o cuatro de la mañana, para prender el fuego para alimentar a la familia, para hacer el café para el desayuno de nuestros maridos y nuestros hijos... Después trabajamos el maíz para alimentar los animales. Despertamos a los hijos, les damos de desayunar y los preparamos para que vayan a la escuela".
Lavar, limpiar, preparar la comida, y alimentar a todos, son tareas que se completan antes del mediodía; sólo es después de que todos han gozado la comida de la tarde, cuando las mujeres tienen unos cuantos momentos libres para que ellas mismas se puedan dar un baño, sólo para regresar a la casa de nuevo a preparar la comida de la noche. Esta es la vida de una mujer del campo en las comunidades indígenas. En palabras de una de las mujeres representadas por la carta, "nosotras somos lo que sostiene unida a la comunidad".
Foto: D.R. 2007 Jesús Domínguez |
Como la mayoría de las discusiones sobre la posición de las mujeres en el EZLN y sus comunidades civiles, en esta mesa y en otros encuentros de la reunión de Año Nuevo en Oventic, la obra y el liderazgo de la Comandante Ramona fue exaltado como una ilustración de lo que las mujeres pueden lograr dentro del movimiento. Ella ha inspirado a muchas otras mujeres: Zapatistas, no-zapatistas, indígenas y no-indígenas. Como una de las más importantes figures del movimiento, esta mujer tzotsil de pequeña estatura fue reconocida y respetada por toda la nación y por el mundo antes y a partir de su fallecimiento en Enero del 2006. Como luchadora insurgente ella condujo la batalla en la cual, el 31 de Diciembre de 1993, El Ejército Zapatista de Liberación Nacional tomó la ciudad de San Cristóbal de Las Casas. Como diplomática, Ramona fue una de las principales redactoras de la Ley de las Mujeres del EZLN. Más adelante, ella condujo a la delegación de 1996 a la Ciudad de México para los diálogos por la paz, y fue co-fundadora del Congreso Nacional Indígena. El poder de esta mujer y el legado de su obra se hace sentir en reuniones como esta, donde se escuchan los gritos de "¡Viva Ramona, Viva!". Como un testamento a la importancia internacional de su obra, un representante de Kurdistán habló de un puente de solidaridad que se está construyendo con su nombre.
Foto: D.R. 2007 Jesús Domínguez |
Para las mujeres en estas comunidades la apertura de cooperativas ha sido una de las formas que ellas han tomado para reorganizarse por ellas mismas. Una de las principales fuentes de ingresos para muchas familias es el arte de los tejidos de las mujeres. Una rápida caminata a través del centro de San Cristóbal y otros pueblos y ciudades de los Altos de Chiapas, lo lleva a uno a quedar inundado por los colores y las texturas de los textiles producidos por manos de mujeres. Para muchas mujeres este trabajo se hace entre una multitud de otras tareas, y viene de horas de dedicación a los detalles. Aunque la obra textil es tan valiosa y hermosa como la cultura que la produce, hay mucha explotación de la labor de las mujeres cuando se les encarga por pieza o trabajan por contrato. Las cooperativas de estas mujeres han reclamado el derecho a decidir por ellas mismas la forma en la que quieren trabajar, y el salario que deben obtener por ello. La organización es por y para las mujeres. De esa manera, han sido iniciados nuevos programas que dan seguimiento a la estructura y éxitos de las cooperativas artísticas, con producción de animales, horticultura, tortillerías, panaderías, y tiendas colectivas.
Foto: D.R. 2006 Jesús Domínguez |
Magdalena y Elena, representantes de los altos de Chiapas del Caracol II de Oventic, donde se llevó a cabo el encuentro, nos recuerdan, con sus propias palabras, que: "con esta participación por parte de las mujeres, demostramos nuestro valor y nuestro enojo frente al mal gobierno, y en contra de las injusticias...".
Traducción al español por Francisco Álvarez Quiñones, 27 de Enero