The Narco News Bulletin |
August 15, 2018 | Issue #67 |
narconews.com - Reporting on the Drug War and Democracy from Latin America |
|
Existe una sola escuela de periodismo en el mundo dedicada a enseñarle a los periodistas cómo ayudar a los movimientos sociales a cambiar el mundo comunicando sus historias y objetivos de la manera más efectiva. Contamos con tu ayuda para hacer que nuestra escuela vuelva a cobrar vida en 2016.
La SAJ, por sus siglas en inglés, se construye en base a los aportes de personas como tú, así como los de nuestros propios profesores, quienes ofrecen su tiempo y financian sus propios gastos de viaje para que podamos compartir sus experiencias de vida con nuestros becarios. La escuela no cobra matrícula.
El programa es gratuito para aquellos que son seleccionados para asistir. Por sobre todo, la escuela depende de amigos y simpatizantes como tú para ayudar a cubrir los costos de llevarla a cabo. El año pasado lanzamos por primera vez una campaña de Kickstarter, y juntos batallamos duro para reunir apoyo para nuestra escuela. Más de 300 de ustedes nos donaron entre uno y mil dólares. Nos emocionó tal torrente de apoyo. Gracias a este inmenso esfuerzo colectivo, la sesión de 2015 fue la mejor de la historia.
Pero no hay garantías de que la sesión 2016 vaya a ocurrir. En términos financieros, tenemos que empezar de cero cada año. No tenemos patrimonio ni dinero en el banco, y la escuela sólo será posible si tú la haces posible. Una escuela bilingüe de diez días cuesta $75.000 y una más corta, sólo en español, cuesta $30.000.
Soy una periodista y una artista. Hace dos años que dirijo la Escuela. Asistí a ella por primera vez en 2013, en una época de profunda búsqueda de inspiración. Había sido una participante activa de un movimiento mexicano llamado #YoSoy132. En 2012 desafiamos la injusta alianza entre el monopolio corporativo mediático y el partido político PRI, cuyos líderes autoritarios ya habían dominado el país durante 70 años y estaban volviendo al poder con la ayuda de medios antidemocráticos. Pero nuestro movimiento terminó fallando y el PRI reasumió el poder.
Llegué a la Escuela de Periodismo Auténtico en búsqueda de respuestas. Aprendí que para que mis colegas y yo pudiéramos comunicar los objetivos de nuestro movimiento, era importante comprender el funcionamiento de la construcción del poder estudiando movimientos que nos antecedieran. La Escuela también me mostró cuán importante es para los narradores de historias el entender la estrategia, enparticular la noviolenta, para comprender que nuestro periodismo puede tener un impacto directo en moldear el destino de un movimiento.
La Escuela me enseñó todo esto y además me presentó a algunos de mis superhéroes reales favoritos: Personas como Mkhuseli 'Khusta' Jack, organizador de uno de los boicots económicos más efectivos durante la lucha contra el apartheid en Sudáfrica; Johanna Lawrenson, fotógrafa y organizadora que, junto con su esposo Abbie Hoffman, lideraron acciones creativas y exitosas desde el norte del Estado de Nueva York hasta Nicaragua; el Rev. James Lawson, quien cambió el curso del Movimiento por los Derechos Civiles en los Estados Unidos al organizar las sentadas en los mostradores de los restaurantes segregacionistas en Nashville en 1959; Mercedes Osuna, que ayudó a entrenar a miles de voluntarios y periodistas internacionales en apoyo a la rebelión indígena Zapatista en México; Renny Cushing, organizador comunitario estadounidense que a principios de los 80 logró frenar el crecimiento de la energía nuclear sobre la marcha, y Oscar Olivera, vocero de un exitoso movimiento popular en contra de la privatización del agua en Bolivia.
Todos estos increíbles profesores han convergido en una asombrosa escuela gracias a la visión de su fundador, Al Giordano. Él sostiene que el periodismo y la organización comunitaria requieren un conjunto de aptitudes similares. Para hacer cualquiera de las dos, es necesario comprender cómo comunicar claramente. Como una joven periodista involucrada en movimientos para transformar mi país y mi mundo, eso me resulta inspirador.
La Escuela de Periodismo Auténtico valora la práctica por sobre la teoría. Es por ello que tantos de nuestros profesores son personas apasionadas que realmente han ganado y han alcanzado los objetivos de sus luchas por el bien común. Además, hasta donde sé, la nuestra es la única escuela que se empeña en hacer de sí misma una experiencia que cambie la vida de sus participantes. Esto lo logra por medio de una atención rigurosa al detalle y una exhaustiva planificación, a la vez que cultiva una atmósfera de alegría y celebración. Como dice Al: "El placer es un factor de motivación para aprender más poderoso que el miedo." Creemos que la buena comunicación y narración son nutridas por dicho ambiente.
Podría haber elegido hacer muchas cosas con mi vida, pero creo que la Escuela de Periodismo Auténtico representa mi mejor oportunidad para cambiar el mundo. Podría haber elegido construir casas, repartir comida, trabajar en la frontera, apoyar a mujeres violentadas, luchar por los derechos homosexuales o contra las desapariciones forzadas.
Pero elegí dedicar mi vida a esta escuela porque creo que es un amplificador de cambio alrededor del mundo. La escuela no ofrece un camino directo hacia un nuevo mundo; pero es un punto de convergencia que proporciona herramientas a diferentes individuos para que apoyen la revolución de su elección.
También es la única escuela en el mundo que no cobra un centavo, en la que todos los seleccionados están automáticamente becados, gracias a tu aporte económico. El dinero no es un factor al elegir las clases de cada año, sino sólo el talento y la pasión de cada solicitante. Tampoco pedimos curriculums.
Nuestros estudiantes han sido parte de un grupo de derechos humanos en Haití, carpinteros, escritores, padres de familia, periodistas independientes o personas con poca experiencia previa en periodismo.
No nos interesa de qué han trabajado nuestros becarios en el pasado. Sólo buscamos darles a individuos excepcionales y talentosos, las herramientas que necesitan para contar historias para cambiar el mundo.
Al creó la escuela hace 15 años atrás junto con el periodista mexicano Mario Menéndez, editor del periódico "¡Por Esto!"; luego de que ambos fueran demandados por Citibank en Nueva York por su trabajo de periodismo investigativo sobre la Guerra Contra las Drogas (War on Drugs). Al y Mario ganaron el caso, el cual estableció un precedente legal que extendió las mismas libertades de prensa que gozaban los medios impresos a los periodistas de internet.
Al concibió la Escuela como una manera de honrar el trabajo de los maestros y mentores que le enseñaron. Escogió el calificativo "Auténtico" en honor a Mario, quien acuñó el término para referirse al tipo de periodismo que siempre está al servicio de los intereses de los movimientos populares.
La Escuela de Periodismo Auténtico se ha convertido en un movimiento en sí misma, y tú puedes ser parte. La escuela ha entrenado a cientos de becarios de cada continente habitado del mundo, pero sólo persistirá con tu apoyo. No importa si donas un dólar o dos mil; cada donación es importante.
Por favor ayúdanos a garantizar que la Escuela de Periodismo auténtico ayude a salvar el mundo... ¡otra vez!
Únete a la campaña en Kickstarter o en la página authenticjournalism.org para aprender más de la escuela.